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Las Uvas de la Ira (John Steinbeck)

Uno de los compañeros de trabajo, cree que todo el grupo somos una panda de ignorantes menos él, que es el más pedante, cree que yo tengo aún salvación porque me gusta leer y me recomendó este libro: Lo definió como una alta dosis de cruel realidad, y así es. Conforme iba leyendo el libro, me sentía culpable de tener una cama, de tener tres tipos de jabones faciales, y mil champús distintos abiertos, me sentía mal por poder comer a todas horas y por tener un trabajo sentada. Me acordaba de todas y cada una de las anécdotas que me contaba mi abuela de cuando era joven, y me iba poco a poco viniendo a mente el libro de las Cenizas de Ángela, que tiene otra tanda de absurda y cruel realidad. Conforme leía el libro, pese a sospechar lo que pasaba, me sentía mal por las ilusiones que se hacía la gente, pensando que lograría algo en la vida, que no se iban a morir de hambre, que lograrían un buen futuro, aunque estuvieran rodeados de absoluta miseria. Poco a poco iba sintiendo más asco d

La bixa.

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El miércoles, mientras iba de camino al trabajo, me encontré escondido entre un árbol y el bordillo de la acera un conejo, que ni se movía, ni se quejaba si le tocaban, empapado y en los huesos. Asustada, localicé a la presidenta de mi protectora y le conté lo que pasaba. Volví hacia casa con tupper, bolso, chaquetas, etc y un conejo, lo coloqué como pude en una jaula enana, le puse comida y corriendo a trabajar. A la vuelta de trabajo, gracias a ayudas varias, conseguí piensos, consejos y todo lo demás y empezó mi aventura con la bolita de pelo. Parecía una hembra así que la llamé bixa y empecé a buscarle casa. La peque resultó no ser tan peque (es una adulta ya bien madura), era una tragona, asustadiza y super cariñosa. Cada mañana y cada noche devoraba un plato de pienso ante mis narices y otro tranto del siguiente que le rellenaba. El tazón de agua, bajaba con unos lengüetazos que impresionaban (era una aspiradora con lengua) y no hablemos de la escarola, daba gusto verla desap

Ya estoy aquí

Una de las marcas que más me gusta de maquillaje es Inglot, no es que sea una gran marca con gran fama, pero puedes montar las paletas que tú quieras a tu antojo y gusto, motivo por el cual puedes personalizar totalmente lo que quieres usar. Como soy una follonera, estoy "mal de la cabeza" y tengo una personalidad bastante particular, me hice con las chicas de la tienda casi desde la segunda vez que la pisé. Tú eres la chica de los verdes y colores oscuros. Ellas erre que erre con los coloretes y yo que los cojones en vinagre. La última vez que me planté en la tienda, opté por la paleta más ambiciosa que tienen, la más grande, a riesgo de cagarla con los colores y tal. Hora y pico después, salí con un poti-poti de colores caótico como el que más. En casa, monté mi señora paleta y salieron unos repes. Al día siguiente me presenté a la tienda para cambiarlos, otro horror elegir, pero al final lo logré. ¿Por qué cuento todo esto? Porque una de las chicas me preguntó si, te

La mecánica del corazón (Mathias Malzieu).

Muchas veces se dice que no elijas un libro por su portada ni la gente por su apariencia, pero en el caso de los libros no lo puedo evitar, como la portada me llame, la hemos liado. Y en este caso es lo que ha pasado, la portada me encantó. Es una ñoñi-historia de amor de un chico con un reloj de cuco y de madera enganchado en el corazón porque este es muy débil, y para que no se le rompa el reloj (y por lo tanto no se le pare el corazón) no puede tener sentimientos intensos: amor, odio, desamor... A que no adivináis qué. Pues sí, el insensato se enamora, se enfada y sufre del desamor. Pese a que las historias diferentes me atraen, a medio libro ya estaba un porquito harta de tanta ñoñeria, y excepto las dos escenas de violencia que hay en la historia, el resto no ha despertado demasiado interés en mí. Lo sé, soy una borde sin sentimientos, que lo rosa no le va y las flores y bombones tampoco. :) Recordad : Morded o Seréis Mordidos     # Escuchando...   Nightwish; For the He

10 años

Pues eso, tal día como hoy, 10 años atrás empecé esta locura...

Maus (Art Spiegelman)

Maus, es la biogradía - autobiografía de Art y su padre, de la época nazi que vivió su padre y cómo él recibe su historia. Los judíos son ratones, los nazis son gatos y los polacos son cerdos. El hecho que la historia esté interpretada por animales en lugar de personas, la hace menos dura, pero cuando te planteas segú que escenas te sorprendes de lo que llegó a pasar. ¿Cómo hubo gente que pudo hacer algo así? ¿Cómo se pudo permitir? ¿Tanto poder hubo de manipulació de la realidad? Es la historia de un superviviente, de un superviviente agarrado, que gracias a su forma de ser consiguió salir adelante con astucia, austeridad y realidad. Hubo grandes desgracias y pocas alegrías, y la frase que más me ha impresionado de la historia es "jamás sobrevivió al campo de concentración", como si el resto de su vida hubieran vivido como unos zombies. Eso es algo triste, y muy duro, pero sobre todo muy muy triste. :( Recordad : Morded o Seréis Mordidos     # Escuchando...   Manowar;

Persepolis (Marjane Satrapi)

Persépolis es la autobiografia de Marjane una chica de Irán que explica su historia y la historia de su país. Es un cómic que iba detrás de él desde hacía mucho tiempo, pero que por falta de dinero no me había animado a comprar. Su dibujos son muy simples, en blanco y negro, pero te puedes hacer una idea de todo lo que pasó, de una sola vista, da la impresió que va a ser algo cutre, pero trata un tema con un trasfondo increíble y algunas cosas que ni te puedes imaginar. Desde fuera, Irán da una imagen totalmente distinta a la que muestra Marjane con su historia, y al final de todo el libro lo pone, esto es lo que hay no lo que creéis saber, y es algo que me ha encantado. Es triste por todo lo que ha tenido que pasar, pero es increíble que haya gente que aún ahora lucha por sus derechos. Es una adquisición que no me arrepiento de haber invertido en ella, y la he recomendado ya unas cuantas veces. Recordad : Morded o Seréis Mordidos     # Escuchando...   Hadouken!; Bounce - Orig