Más de una vez he deseado hablar de los ronquidos de la gente con la que he compartido cama o habitación, ahora es un momento ideal para hablar de ello. No aguanto los ronquidos, me cuesta mucho dormir, así que estar oyendo una respiración cambiante cada medio minuto junto a la sonata mágica de los sueños es exasperante. Empecemos con los sonidos nasales de mi madre producidos por el tabique torcido, al final decidió dejar de dormir conmigo porque la despertaba cada cinco minutos con el 'mamá, que roncas...' . Prosigamos con mi padre que sus ronquidos son curiosos por ser como una especie de intentona a escupir aire y de vez en cuando el sonido nasal, cuando crees que ya ha cogido ritmo de golpe llega el silencio y parece ser que el tipo deja de respirar. Genial, susto incluído. ¿Y mi hermano? Otro caso particular: acutalmente ronca, antes hablaba y comía durmiendo, sí, raro pero cierto. Ahora me toca a mí, pero... ¿Sabéis una cosa? Excepto mi padre que dice que ronco (curiosam...