Exponerse o no.

Sé que la respuesta es no, sé que está mal, sé que no debo, pero por eso el riesgo nos estimula tanto.

Desde hace un tiempo, uno de los compis del curro, por una de esas conversaciones sin sentido que tienes, sabe de la existencia de "un blog", "un blog de una friki de las chinchillas y los libros". Me preguntó que si poniendo eso en google me encontraría y yo me quedé pensando, ¿saldría con esas palabras clave? Pues no.

El tema, es que es un compi-amigo, es alguien con quien hablas dentro y fuera del trabajo. Si te molesta algo se lo puedes decir, porque sabes que si le molesta a él te lo dirá. Nos aliados, en "contra" del jefe, en los momentos flacos y nos separamos y vamos a nuestra bola en los momentos fuertes. Somos dos cascarrabias, negativos, solitarios y antisociales, que nos llevamos de cojones.

El problema es, que con el tiempo, nos hemos ido pillando más confianza, es alguien que cada vez le pica un poco más la curiosidad, y de vez en cuando me pide la url. Hoy le he dicho que sí, hoy le he dicho que cuando estuviera en casa se la pasaba, que podría cotillear y chafardear. Al llegar a casa, me he dado cuenta que no, no quiero que me lea, no quiero que sepa qué pienso en realidad, no quiero exponerme de esa manera.

Una vez más, he decidido separar la vida real de la virtual, y sé que en el fondo es lo correcto, pero por alguna razón que no entiendo, me siento culpable.

Recordad: Morded o Seréis Mordidos

    # Escuchando...  Sirenia; In Sumerian Haze.