A mal tiempo, buena cara.

Y cuando hace demasiado buen tiempo, la cara chamuscada...

No es que ahora mismo la situación familiar esté para tirar cohetes, como consecuencia ahora es momento de ceder a los caprichitos paternos de acompañarle a los sitios o de sonreir falsamente ante mi madre, es lo que hay. Supongo que por eso me siento apática, despistada, poco animada encima por no encontrar trabajo y sin demasiadas ganas de buscar.

El sol, el calor, los follones y los desastres están acallando mi sonrisa y mis energías logrando que duerma mucho y el resto del tiempo me dedique a seguir a mi padre donde sea, o estar a su lado cuando llama al pueblo de mi madre.

Lo peor de todo, es que no habrá tiempos mejores, empeorarán y hay que prepararse para resistir. Hay que joderse.

Recordad: Morded o Seréis Mordidos

    # Escuchando...  Iced Earth; Desert Rain.