Ya tengo dos pelotas.
Y eso que soy tía, pero bueno, tanto la chinchilla como el hámster ya tienen una forma de corretear por la habitación sin que a mí me de un soponcio por tener que controlar que nadie coma cables. La verdad es que la de la chinchilla además de ser enorme y pesar tres cojones y medio, es muy cara, pero me parece que le ha cogido ya el gustillo y la podré tener suelta mucho rato.
Lo malo de esto, es que ahora se está mucho menos quieta. Sigh.
Recordad: Morded o Seréis Mordidos
# Escuchando... Los golpes contra las paredes de las dos pelotas. :)
Lo malo de esto, es que ahora se está mucho menos quieta. Sigh.
Recordad: Morded o Seréis Mordidos
# Escuchando... Los golpes contra las paredes de las dos pelotas. :)
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