Chincha rechincha.

Como soy una pija de mierda tengo aire acondicionado super-chuli en mi habitación. Había diferentes fragancias a elegir, así que elegí la que esta de moda: moho húmedo, mola que te cagas. Como cada día vengo en la limusina de San Fernando negro, soy la más molona de todas aunque no le funciona el aire acondicionado y por lo tanto sudo un poco. Subo corriendo a mi territorio a encender mi aparato ultra- potente que sólo necesita media hora para templar la zona y también meto a la chinchilla por eso de que luego no me exija un trozo de helado de alfalfa.

Porque mi aparato es mejor que el tuyo, porque saca aire húmedo que huele a moho, porque mi chinchilla estornuda cada vez que entra (pero disfruta del aire aromatizado), puedo decir tranquilamente que me tienes envidia cochina. Tú aguantas tu aire helado mientras que yo disfruto con el ventilador que tengo en el techo. Ea.

Recordad: Morded o Seréis Mordidos

    # Escuchando...  Arch Enemy; Taking Back My Soul.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
UN ESPEJO EN EL DESIERTO

El poeta que llamamos Rumi cuenta, en el Masnavi, la historia de un hombre de horrible fealdad que atravesó a pie el desierto.
Vio algo que brillaba en la arena. Era un trozo de espejo. El hombre se agachó, cogió el espejo y lo miró. Nunca antes había visto un espejo.
-¡Qué horror! -exclamó-. ¡No me extraña que lo hayan tirado!
Tiró el espejo y prosiguió su camino.

Ya, no tiene nada que ver. Para que no te deprimas básicamente.