Oscuro y miedica.

Como asesina compulsiva de mascotas que soy, me gusta ir reponiendo los huecos dejados por los caídos para no echar de menos a las bolas peludas a quien pinchar. Tatequieto cayó, se murió tal vez de frío, tal vez.

Ni corta ni perezosa, fui en busca de otro hámster común. Esta vez elegí uno negro (para combinar con mis bambas), que en el momento de cogerlo, desapareció de donde estaba durmiendo con sus amigitos para aparecer en la otra punta de la jaula puesto a dos patas, chillando y con la boca abierta. Si no fuera que conozco el comprotamiento de los hámsters, diría que quería abrazar la mano de la dependienta.

Así pues he cambiado un tatequieto blanco, marrón y negro histérico perdido, por un aticomocoñotellamo negro, medica, atontado y aficionado a sentarse encima del calcetín en lugar de usarlo como madriguera.

Saludos.

Recordad: Morded o Seréis Mordidos

    # Escuchando...   Slipknot; Everything Ends.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Pero, ¿tú que tienes en casa? ¿Una jaula o el Corredor de la Muerte?
Anónimo ha dicho que…
De tal palo tal bichito.
Saludos para "aticomocoñotellamo negro".
Inner Sanctum ha dicho que…
Lo mejor los nombres de los hamsters, jeje :P. AiSs yo es que a esos mamíferos.... te digo que desde que me mordió uno, lo llevo mal.

Bxx.