La libertad de no tener comentarios.

Ya van varias personas observando lo mismo: la ausencia de los comentarios... Realmente, es una decisión tomada con tiempo y a largo plazo, no ha sido de un día para otro, ni un impulso.

Ahora, no tengo por qué comprobar si la gente me escribe o no, si la gente me lee.. etc, simplemente estamos el weblog y yo, y los demás sobran, pueden observar a parte o pueden largarse, poco importa... Siempre les queda enviar un e-mail diciendo la suya (apelo a la holgazanería de esta sociedad para saber que casi nadie lo hará).

Así pues, este weblog, poco a poco se va haciendo más antisocial, facilitando que su dueña sea aún más cerrada que antes y que pueda ir perfectamente a su bola, sin depender de que el personal vaya a ponerse a su favor o en su contra.

Es ley de vida, o te callas o te arranco la lengua.

Saludos.

Recordad: Morded o Seréis Mordidos

    # Escuchando...  Rhapsody; legendary tales